La primera en la frente

Si me ves por la calle
no corras a esconderte,
no te tapes la cara,
no aprietes los dientes,
y no finjas ser otro,
que yo sí puedo verte.
¿No sería más fácil
que dijeras "se siente,
no quiero que me hables,
no quiero ni olerte"?
Si pudieras decirlo
yo sabría entenderte,
y que tú abras la puerta
no implica que entre.