Bitácora de Alvex

Según un estudio publicado en la prestigiosa publicación SSFSP, la autora de esta bitácora distribuye su tiempo de la siguiente manera:
- 10% del tiempo, pensando en las musarañas
- 57,5 %, perdiendo cosas
- 87,9 %, buscándolas
- 99,9 %, susupirando inútilmente
- 100 %, tratando de respirar
- 0,002 % pensando acertadamente
- 80,5 % organizando un caos
- 98,2 % intentando ordenarlo
- 100 %, maldiciendo su carácter
Para los amantes de la lógica, la revista hace una simpática aclaración (innecesaria, por supuesto)de que algunas, más bien pocas, actividades`puede realizarlas simultáneamente.

Para que ustedes se den cuenta de mi madurez, mi refinado estilo y mi casi exagerado sentido del ridículo, les muestro mi última adquisición:

"¿Me puedes firmar los huevos?"
No, si va a resultar que el mío es un lugar muy estimulante para trabajar.

¿Hay algún encauzador de vidas ajenas en la sala? ¿O un descubridor de vocaciones tardías? No es por alarmar, pero me parece que quien pilota este blog está dando bandazos, y esto no pinta muy bien...

Lean esta simpática noticia sobre un pícaro jovenzuelo que pretende no sólo vivir de la sopa boba, sino que esta sopa sea más bien un cocido completo.

"-¿Tenéis libretas?
- Sí, claro
- ¿De las de apuntar cosas?"

Leo en La Voz de Galicia, como siempre, que el temporal de viento que nos irrita, perdón, nos visita, ha dejado árboles y mobiliario urbano caídos y situaciones curiosas, como la siguiente, que les copio tal cual:
Uno de los incidentes más insólitos que dejó a su paso el temporal de ayer fue el que tuvo que enfrentar la tripulación del helicóptero Pesca 2, cuando por la tarde fue requerida para realizar un rescate. La misión, por fortuna, no tenía que ver con marineros en alta mar, ni siquiera con riesgos humanos, sino con un ternero al que las intensas lluvias de días pasados habían dejado aislado en una zona del río Landro situada en el municipio de Muras, a unos diez kilómetros de Viveiro en línea recta.
El fuerte viento registrado en la zona (MeteoGalicia midió en la vecina Burela rachas de 117 kilómetros por hora), la falta de luz y lo escarpado del terreno frustraron la operación, que finalmente concluyó sin éxito. El helicóptero tuvo que dar la vuelta y abandonar el lugar, dejando al animal aislado, acompañado de su cuidador.
Suponemos que una vez que el viento ha amainado el helicóptero habrá vuelto a rescatar al simpático animal, dejando a su cuidador a su bola en el río.

A través de ^CeL^ he sabido que una profesora le ha cortado la lengua a un alumnito que hablaba demasiado, como pueden leer aquí. La profesora ha sido suspendida, lógicamente dirán ustedes. Sin embargo, yo no dejo de pensar que debo tener cuidado con mis deseos de, por ejemplo, meterles los petardos a algunos niños por ciertos lugares, pues al parecer no está muy bien visto por la sociedad en general.