Metafísica pura
Posted by Alvex in desvaríos varios, porque yo lo valgo
Cuando me miro al espejo, no puedo evitar preguntarme quién es esa persona que me mira desde el otro lado. Y lo mismo me ocurre cuando veo fugazmente mi reflejo en un escaparate: doy un respingo cada vez, porque no me reconozco pero ¡es alguien tan familiar... !
Pero sobre todo me intriga mi cara: ¿es realmente la que me corresponde? Es decir ¿es, como dicen, el reflejo de mi alma, o a mí me tocó la que sobraba? Porque además, mi cara es extraña (tranquilos, niños, no huyáis, no es tan extraña, no en ese sentido), no se parece demasiado a la de ninguno de mis parientes. Y ha cambiado mucho, especialmente en estos últimos años, con lo cual me pregunto ¿este cambio estaba previsto, o he hecho algo que haya modificado su evolución natural? ¿Yo soy yo o mi reflejo? ¿Debería cambiar mi medicación? ¿O lo que me ocurre es que salgo poco?
This entry was posted on at 5:57 p. m. and is filed under desvaríos varios, porque yo lo valgo. You can follow any responses to this entry through the RSS 2.0. You can leave a response.
Publicar un comentario