Cosas que no soporto de mí, 2ª parte

Para que vean como ando,les cuento que ayer fui a llevarle unos bombones a una señora, como agradecimiento por la ayuda prestada para poner en marcha mi tiendita. Bajé del coche a toda mecha, con una bolsa en la mano, estuve un rato de charla con ella y al final le entregué el obsequio y me fui, dejé el coche en el garaje, me acosté y, cuando estaba a punto de dormirme, empecé a preguntarme: ¿le entregué los bombones a la señora? ¿o lo que le di fue la bolsa con la toalla sucia (que llevaba para lavar en casa)? Como era medianoche y no era cuestión de levantarme a mirar, me pasé la noche imaginándome la cara que se le pondría a la buena mujer cuando abriera la bolsa dispuesta a comer unos bombones y viera la toalla sucia. Por momentos incluso me hizo gracia, no se crean.