Sábado tarde

Tres niños de unos tres años y dos mamás vienen a comprar globos. Uno de ellos se acerca a su madre, y con voz quejosa dice:
- Mamá, ¡me sudan los pantalones!
Mientras tanto, una de sus amiguitas lloriquea:
- ¿Y si me explota el globlo?
Su madre trata de animarla:
- No va a explotar, ya lo verás
- Pero ¿y si lo hace?
- Que no, que no va a explotar
Ya con lágrimas en los ojos repite una vez más:
- Pero ¿y si lo hace?
Su madre pacientemente le insiste:
- No va a explotar, te lo digo yo.
Y de pronto la niña, con voz decidida y nada llorosa dice:
- Pues lo voy a pinchar